Thursday, July 06, 2006


GAZPACHO LLENO DE DUDAS

De miedos repentinos, de sofoco, de un rubor, de repente, desmesurado. Con siete ingredientes imprescindibles pero, más que con cautela, con un cierto temor. Ya no nos repite el ajo y la verdad es que nos hemos quedado con menos de medio diente para casi todo, para el all i oli, para la mayonesa con ajo, para mi gazpacho e incluso para esa estupenda brandada de bacalao que acaricia las tostadas sobre todo en primavera. Ya nos queda todo fantásticamente cremoso sólo con el pímer (la batidora de brazo) y casi sin paciencia. El agua mineral (¿pero es que hay algún agua que no sea mineral?), el aceite de la Cooperativa de La Selva del Camp, en Tarragona, el espléndido y laureado "Antara", el buen chorro de vinagre de jerez, casi el que quieras, la miga de pan, esa tan compacta, tan extremeña y tan todo que dejas en remojo mitad con agua mitad con vinagre, la sal marina y, hélas!, los tomates. A estas alturas del verano, los de cualquier zona y bien maduros y olorosos. De esos que te comerías a bocados, sin sal, sin nada, chorreándote por la barbilla. Que si los escaldas para pelarlos, los troceas y los bates. Que si los dejas enfriar antes de mezclarlos con el pan, el mínimo ajo machacado con una punta de sal, el aceite y el vinagre. Que si dejas la pasta a enfriar, una vez más, antes de añadirles el agua. Lo que quieras.

Pero entonces, ahí, vienen las dudas. ¿Antes o después de la tortilla de patata?. ¿La tortilla con o sin cebolla?. ¿Todos los huevos batidos por igual?. Y si va antes de la tortilla, ¿con guarnición de huevo duro y dados de pan?. ¿Con virutas de jamón?. ¿Con tiras de remolacha?. Y si aparece después, ¿a palo seco y más aguado?. ¿Con unas bolas de melón?. ¿Con sandía?.

1 comment:

laollasuiza said...

cada uno a su manera. ;-) es eso que me gusta en la cocina.