Thursday, December 06, 2007
TARTA MARÍA LUISA
Hoy cumple noventa años la senyora Tomàs que así escrito me suena raro. Espléndida, con un sentido del humor que ya nadie usa, con una ironía fina, antigua y familiar, nunca se acercó mucho a la cocina y le alabamos la costumbre. Sana, sobre todo.
Por eso, y para celebrarlo, sus años y sus costumbres, le tomamos prestada la receta de la tarta al señor Rondissoni, que tanto hizo por las amas de casa burguesas de antes de la guerra y que ahí quedó escrito para que sus epígonos malos cocineros y peores reposteros le hagamos un obsequio, de letra que no de puño, a nuestras amistades: “Se ponen en un cazo 4 yemas de huevo y en un perol las 4 claras. Se mezclan las yemas, 125 gr de azúcar y un poco de corteza de naranja rallada, y se trabaja con una cuchara de madera hasta obtener una pasta fina, esponjosa y blanquecina. Seguidamente se baten las 4 claras a punto de nieve fuerte, se les mezcla el preparado de las yemas, la harina y la levadura, y sin removerlo mucho se echa en un molde de torta desmontable que tenemos previamente untado con mantequilla y espolvoreado con harina. A continuación se cuece al horno durante treinta a treinta y cinco minutos, luego se saca de él y se deja enfriar.” Eso es el bizcocho contado de la mejor forma posible. Entonces lo abre por la mitad, lo moja con un poco de curaçao, lo rellena de mermelada de albaricoque, lo cubre con yema de mantequilla, lo adorna con virutas de chocolate y con una manga y más crema y chocolate diluido, dibuja el escudo de Montblanc.
Subscribe to:
Post Comments (Atom)
8 comments:
Manolo: A medida que entro en años me voy volviendo cada vez más goloso. Voy a elaborar esta receta. No te quepa duda, y la compartiré con mís más directos allegados, ya sean familiares o amigos y no precisamente por este orden.
S´em ha girat feina. Tengo que ir pensdando en lo que voy a preparar para noche buena. Es una cena a la que durante muchos años he asistido a regañadientes, ahora ya voy con el piloto automático y además cocino para treintaytantos.
El año pasado cociné vedella amb bolets, el anterior mandonguilles amb sèpia y este año, pues no sé, estoy pensando en unos calamares rellenos con sorpresa. Lo peor es la panzada de trabajar que me pegaré. hay que pensar en la escudella, los canelones etc.
Lo dicho, s´em ha girat feina.
PD: Mis felicitaciones a esta bella dama de Montblanc que cumple tantas primaveras.
Doncs molta feina tens, Despertaferro, y de la buena: escudella, canelons y esos calamares que ya saben a gloria. Paciencia, bon seny y ganas.
Tendré que ponerme a ello, aunque sólo sea porque mi madre se llama Luisa. Ya te contaré, aunque aviso: como no me gusta lo empalagoso, generalmente en todas las recetas de dulce reduzco a la mitad la cantidad de azúcar. El resto lo pongo yo. ;)
Un beso.
No tienes la mitad sino el doble. Y es un piropo.
En nombre de la homenajeada. GRACIES.
Yo también me siento con la obligación de hacer la tarta. Ya lo comentaré.
Nuevamente MUCHAS GRACIAS.
A vosotros. No hice la tarta más que virtualmente pero sí el crucigrama de Fortuny. Lo peor es que lo acabé en seguida: ¡me sabía de antemano muchas de las soluciones!
¿Sabes Manolo?, leyendo tu blog, caída que pasa estoy “aprendiendo a comer mejor”, disfrutando cada bocado, dejándome llevar por los sabores...
Sigue así manolo, juntado estos dos artes: la literatura y la gastronomía.
Un abracete, Víctor.
Gracias, Víctor. Me alegro mucho de que disfrutes con mis textos, juntos y revueltos.
Post a Comment