Saturday, June 13, 2009

INCOLORO, INODORO, INSÍPIDO



Hace unos días alguien incluía en una lista secular de perversiones al higienismo, sobre todo el alimentario. Me acordé enseguida del doctor Capo y de su teoría, la trofoterapia, del que aún conservo algún libro con las cubiertas color carmín, y del antiguo y único restaurante vegetariano de la Barcelona de los años sesenta-setenta, el de la calle Canuda, donde los viejos combatientes del crudivorismo, el nudismo y hasta de la magia negra masticaban, pensando probablemente en esperanto, los recuerdos de las cortas repúblicas españolas mezclados con un puñadito de algas iziki (ésas que hacen crecer las uñas y conservan el cuero cabelludo) y unas cuantas berenjenas fritas en aceite de cualquier cosa.

Hoy he visto el anuncio del nuevo vino de las muy respetables bodegas Torres, que se llama Natureo, tiene 0,5 º de alcohol y aporta únicamente 22 kilocalorías por copa (de vino). Seguramente no lo voy a probar nunca a no ser que los señores Torres me inviten expresamente a ello, y no digo ni que no huela ni que no sepa. Es que me da pena.

13 comments:

DESPERTAFERRO said...

Manolo: yo tampoco pienso mterme ni un sólo buchito de ese vino que debe ser lo más parecido al agua de colonia pero con menos grados.
También comí en ese santuario de la calle Canuda, pero una sola vez y juré por los clavos de cristo no volver jamás de los jamases.
Lo del vegeteriano prosoviético de la calle Santa Anna era otra cosa, no había algas y se podía comer judías y garbanzos aunque sín choricillo, ni morro ni oreja...Una auténtica pena.

manuel allue said...

Muy bien lo del "vegetarianismo prosoviético de la calle Santa Anna". En las barricadas de los recuerdos fallidos (o fallados), las píldoras del doctor Negrin: lentejas cocidas a palo seco.

Louis Finch said...

"Natureo" rima con cachondeo... y nadie se haría daño si lo llamaran mosto, que es una bebida honrada aunque minoritaria. Pero una vez en el Priorato me dieron a probar un mosto de uva Cabernet-Souvignon, o Soubernet-Cavignon, que no recuerdo bien, rojo tinto que sabía a gloria. Lamentemos que la familia Torres se apunte a la liga o manía antialcoholica que tanto daño hizo en Chicago en los años 30... ¿o fue en otro sitio?

manuel allue said...

El mosto, mosto y el vino, doctor Finch, vino, claro está, alcohólico, calórico, tanínico y, según cuando, desmesurado. Hoy es Octava de Corpus, la antigua Sacramental, y en su tierra, creo recordar, se merendaba después de la procesión arroz con leche con mucha canela, una especie de melindros (o melindres) y un moscatel áspero y glorioso, parecido al de Jueves Santo. Merendemos, pues, sin miedo ni al calor ni a las calorías y a lo mejor en honor del Santísimo Sacramento, que para algo está.

DESPERTAFERRO said...

Merendemos todos juntos en sagrada comunión, como decía el Oriamendi.

manuel allue said...

¡Bravo!

aparis said...

En los últimos años, hemos pasado de salvar lo insalvable añadiéndole los prefijos “natur”, “eco”, “medical”, etc. y así los del gas, nombrándole “natural”, parece que sean los talibanes del medio ambiente. No comprendo que todavía no contemos con el “Ecobanesto”, la “Naturcaixa” o el “medicaldonut”.

El vino de 5 grados era lo que nos faltaba. Para emborracharnos necesitaremos tres cajas por persona, como con la sidra.

manuel allue said...

¡Viva el artificio!. Artificial no siempre es antónimo de natural, que puede ser sinónimo de artificioso. Así que, ante tan naturales artefactos, voy a ponerme a buscar sinónimos de cordura el resto de la tarde.

DESPERTAFERRO said...

Manolo: no pierdas el tiempo con esas cosas. Lo que hay que hacer es constituir un piquete de hombres de acción dispuestos a boicotear y romperle la cara a quienes beban este sospechoso brevaje.
¡ Viva el vino del Priorat!

manuel allue said...

Pues que viva el vino (el del Priorat y el de la Terra Alta).

delantal said...

Jajjaajajajaja
final glorioso el de tu post.
Realmente lo que da pena es la gente que demanda este tipo de "productos", que es cada vez más.
Un vino que no es vino, para hacer que bebes pero no bebes. Me recuerda a cuando yo jugaba de pequeña a las casitas.

starbase said...

Los abstemios promovemos el consumo de mosto, que cuesta encontrarlo bueno por cierto.

Mi padre tenía libros del tal N. Capo y son tremendos.

manuel allue said...

Pues sí, Delantal y Starbase; tremendo es el presente de los edulcorados. Los demás, beatus. aunque nos cueste alejarnos del mundanal ruido. Pacientes y felices.